Aún conservo en el congelador, parte de la salsa de la Carrillada Ibérica que hicimos hacer algún tiempo. Una salsa con mucha potencia y que perfumará todo nuestro guiso de Patatas con Alcauciles. Fácil, rápido y lleno se babor.
Patatas con Alcauciles, originalmente cargada por M TAVORA.
Ingredientes
Salsa concentrada de carne | 12 granos de pimienta negra |
4 patatas medianas | 1 hoja de laurel |
4 alcauciles | Pimentón dulce |
3 zanahorias | Azafrán |
1 cebolla | Aceite de oliva |
3 dientes de ajos | Agua |
1 tomate | Sal |
Elaboración
- Cortar la cebolla y los ajos en trozos pequeños y ponerlos con la hoja de laurel en una cazuela con 3-4 cucharadas de aceite a pochar.
- Cuando estén dorados, añadir una cucharadita de pimentón dulce, rehogar y añadir el tomate pelado y cortado en daditos. Dejar sofreír a fuego lento hasta conseguir que el tomate adquiera una consistencia melosa. Añadir un toque de sal.
- Mientras se han ido pochando las verduras, hemos pelado las patatas y cortado en cachetes, las zanahorias cortadas en medias lunas y hemos quitado las hojas más duras y externas de los alcauciles, quedándonos con las más tiernas cercanas al corazón. Le hemos cortados las puntas y troceado en 4 gajos. Una vez preparada toda esta verdura, la añadimos al guiso y mezclamos todos los ingredientes, dejándolo rehogar durante dos minutos.
- Cubrir con agua y dejar cocer a fuego lento durante 20 minutos. A mitad de esta cocción añadimos un majado con las pimientas en grano, un diente crudo de ajo, un poco de sal y las hebras de azafrán.
- Dejar reposar durante 5 minutos
- Servir.
Patatas con Alcauciles, originalmente cargada por M TAVORA.
Después de los tristes acontecimientos acaecidos no hace mucho, retomo la cocina y uso el blog ,como ayuda fundamental en la comida del día a día . Mi pequeño y personal homenaje va a ser el guisar todas las recetas de este blog, incluso aquellas que no sean tanto de mi agrado. Hoy ha sido el turno del las patatas con alcauciles y el resultado ha sido el esperado: exquisitas, como siempre.
ResponderEliminarDescansa en paz, querido hermano, sé feliz allá donde estes. Te echaré mucho de menos pero me quedo con tu amor a la cocina, tu saber culinario y tendré mi casa inundada de aromas y sabores aprendidos de tí.